Por: Amín Sinisterra Núñez, líder del Programa Buenaventura Cómo Vamos
Cuando se habla de criminalidad en el mundo, el homicidio y el hurtado son situaciones que contribuyen dramáticamente a la percepción de inseguridad que tiene el ciudadano, a menos que la comunidad internacional tome medidas decisivas, las metas del Objetivo de Desarrollo Sostenible (16) para reducir significativamente todas las formas de violencia y las tasas de mortalidad relacionadas para 2030 difícilmente se cumplirán.
En marzo del 2022, se conoció el ranking sobre las ciudades más violentas del mundo, se publicó un estudio reciente: las 50 ciudades más violentas del mundo en 2021, de las cuales cuatro son colombianas[1].
En Colombia la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes en el 2020 y en el 2021, fue de 26,8 y de 27, respectivamente. En Buenaventura según el Programa Buenaventura Cómo Vamos, para el año 2020 la tasa fue de 37 homicidios por cada 100,000 habitantes, es decir, Buenaventura superó significativamente la tasa nacional, según el estudio, de las cuatro urbes de Colombia mencionadas, tres están en el Valle del Cauca. La primera es Buenaventura, con una tasa de 59.33 y con una población de 311.508 habitantes, el cálculo de número de homicidios nos arroja 186 muertes violentas el año pasado, situación que ubica a Buenaventura en el puesto número 13, de las 50 ciudades del estudio, sigue Cali, en el puesto 24, con una tasa de 52 homicidios por cada 100.000 habitantes. En el puesto 31 del escalafón está otra ciudad cercana a la capital vallecaucana, Palmira, que tuvo una tasa de 43 homicidios, y cerrando los últimos lugares del ranking aparece Cúcuta, en el puesto 46 con una tasa de 33 homicidios por cada 100.000 habitantes[2].
El panorama descrito, es validado por los resultados de la Encuesta de Percepción Ciudadana #MiVozMiCiudad de noviembre del 2021, donde el 77% de los encuestados manifiestan sentirse inseguros en su barrio y el 88% inseguros en Buenaventura, siendo los homicidios y el hurto las situaciones que más sensación de inseguridad generan en la población.
El seguimiento al número de homicidios (59) en lo corrido del año 2022, refleja una situación muy similar a la del 2021, en igual periodo (enero-marzo) se generaron 60 homicidios. La tendencia no avizora un panorama positivo a pesar de la resiliencia de la población, de las iniciativas de los gobiernos nacional y local, y los resultados de la fuerza pública en cuanto al número de capturas.
La invitación es a que, entre todos, ciudadanía, sector privado y administración distrital, entendamos que el incremento en el número de homicidios en los últimos años tiene distintos orígenes que no pueden enmarcarse en una sola causa. Los enfrentamientos entre grupos ilegales, la delincuencia común y las dificultades socioeconómicas, explican buena parte del fenómeno.
[1] El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal. Organización no gubernamental de México.
[2] El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal. Organización no gubernamental de México.
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